La posibilidad de que el BBVA se quede con entre el 30% y el 50% de los derechos de voto del Sabadell y se vea obligado a lanzar una segunda opa, esta vez con un alternativa en efectivo, va ganando fuerza entre los analistas. Tras la mejora el lunes de los términos de la oferta, la impresión generalizada es ahora que superará el 30% y el debate surge en torno a si quedará o no algo por debajo del 50%.
Por lo pronto, el BBVA ya se ha cerrado la puerta a elevar la oferta. No solo lo ha declarado ante la CNMV, sino que también ha agotado, con el canje de una acción suya por cada 4,83 del Sabadell, el potencial que le ofrecía la ampliación de capital por 1.123 millones de títulos aprobado por sus accionistas en julio del año pasado.
Despejada esta incógnita, se abre ahora una nueva, sobre si