El surgimiento de la estratificación social entre nuestros antepasados tuvo como consecuencia la necesidad de su demostración a través de lo simbólico pero, muy especialmente, de lo material. Más allá de la acumulación de bienes y de poder en todas sus vertientes, en todas las culturas, incluida la nuestra, por supuesto, se extendió su demostración para el conjunto social a través de muy diversas maneras. Desde hogares diferenciales pasando por una alimentación privativa y, asimismo, todo tipo de bienes de prestigio que les separaban de sus coetáneos. La ropa, entendida como el vestuario y sus complementos, ciertamente lo fue desde un inicio.
Sobre esta temática versa el reciente «Archaeological evidence of luxury textiles from Late Antique Serdica» , de liana Borisova-Katsarova, invest