El partido de vuelta por los cuartos de final de la Copa Libertadores entre Palmeiras y River Plate arrancó con todo en São Paulo . Apenas a los ocho minutos, el ‘Millonario’ dio el golpe en el Allianz Parque gracias a un enorme tanto de Maximiliano Salas, que se impuso en el área para conectar de cabeza un centro milimétrico de Juan Fernando Quintero.

El elenco brasileño llegaba con ventaja luego del 2-1 en el Monumental, pero la visita mostró desde el arranque que no se resignaba. De hecho, Franco Armani ya había salvado a River con una atajada impresionante ante un misil de Joaquín Piquerez a los dos minutos.

Tras el gol, Salas celebró a lo grande: rodilla en el piso, brazo en alto, emulando al histórico Marcelo Salas, y luego corrió hasta el banco para fundirse en un abrazo con

See Full Page