D e llegar a incrementarse el impuesto a los refrescos, solo se tendría una recaudación fiscal alta, pero en el tema de salud no se tendrían mejores resultados debido a que la gente seguirá comprando estos productos.
José Antonio Silveria Bolio, miembro del consejo del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (Imef), explicó que la gente no dejará de comprar el refresco con gas, jugos azucarados o bebidas energizantes que contienen un alto porcentaje de azúcar, así como en el tabaco, es decir, los cigarros.
El consejero explicó que la gente dejará de consumirlos por una corta temporada, pero, al ajustar su gasto quincenal o mensual, volverá a la tienda por el envase de dos o tres litros de refresco para llevarlo al desayuno, comida o cena.
El Gobierno de México, en su paquete econ