Puede que hubiese estallado de todas formas, pero estalló en Boston. Más o menos. Gran Bretaña acababa de salir de la guerra de los siete años, que le había reportado la toma de los territorios franceses de América del Norte. Y Londres despertó con vastos territorios y las arcas vacías. La solución, cargar de impuestos a los colonos americanos. Que se quejaron, y las protestas desembocaron en la guerra de la Independencia.
Para rememorar tal sublevación, Boston dispone el Freedom Trail . En cuatro kilómetros enhebra emplazamientos como el Common de Boston donde los soldados británicos se ejercitaban, el cementerio de Granary donde descansan Paul Revere, Samuel Adams y otros patriotas americanos, la Boston Latin School en la que estudió Benjamin Franklin, la Old South Meeting House donde