River perdió con Palmeiras y así se quedó eliminado la Copa Libertadores con un contundente global de 5-2. Y, como pasó con el último partido de fase de grupos del Mundial de Clubes ante el Inter de Milan, el final fue con escándalo dejando una imagen que no deja bien parado al club argentino. Lo increíble fue que uno de los grandes responsables de los incidentes en ambos encuentros fue el mismo jugador: Marcos Acuña .
El jugador de la Selección argentina venía haciendo un buen partido, siempre obligando en el ataque por la banda izquierda y controlando las subidas de Khellven y Andreas Pereira. Pero el final lo opacó.
Es que, si Maximiliano Salas enloqueció a la defensa de Palmeiras , del otro lado, Vitor Roque provocó lo mismo entre los defensores millonarios. Y el que pisó