La policía mauritana ha desmantelado de una red criminal especializada en el tráfico de inmigrantes ilegales desde un país vecino con el objetivo de introducirlos en las Islas Canarias. En un comunicado, la policía indicó que la brigada de investigación de la Oficina Central para la Lucha contra el Tráfico Ilícito de Inmigrantes y la Trata de Personas arrestó a tres sospechosos, entre ellos dos mauritanos y el líder de la red, originario de un país africano, buscado por las autoridades de ese país.
Añadió que 15 inmigrantes ilegales de diversas nacionalidades africanas que residían en una casa de la capital fueron arrestados y posteriormente trasladados a un centro de acogida en Arafat.
Los sospechosos confesaron haber cobrado aproximadamente 18 millones de ouguiyas (unos 85.000 euros)