Lo que parecía una tarde de lluvia normal en la vereda Bejaranas, zona rural de San Gil, terminó en tragedia para una mujer de 78 años. Socorro Garnica Vargas regresaba a su vivienda, luego de visitar a una hermana, cuando, hacia las 7:30 p.m. del domingo 21 de septiembre, un rayo la alcanzó y la dejó gravemente herida.
“Son noticias que uno no está preparado ni espera nunca recibir. Ella estaba en camino a la casa y ahí fue que el rayo la golpeó”, contó conmovida Laura Maldonado, nieta de la víctima.
Los mismos habitantes de la vereda fueron los primeros en auxiliarla y trasladarla de urgencia a un centro asistencial en San Gil. Sin embargo, debido a la complejidad de las lesiones, cerca de las 11:00 p.m. tuvo que ser remitida al Hospital Universitario de Santander, en Bucaramanga, dond