Imagine descubrir una roca gigante flotando en el espacio que podría chocar contra la Tierra, eso exactamente les pasó a los astrónomos con el asteroide 2024 YR4 en diciembre pasado y ahora se convirtió en una montaña rusa astronómica.
Al principio, los científicos calcularon que tenía un 3 % de posibilidades de estrellarse contra la Tierra en 2032. Parece poco, pero en el espacio esa cifra pone muy nerviosos a los expertos.
Sin embargo, después de observarlo mejor, esa probabilidad bajó casi a cero (apenas un 0,28 %). La mala noticia es que ahora hay un 4 % de posibilidades de que este pedrusco de 60 metros de ancho se estrelle contra la Luna y aunque no lo crea, esto sí nos puede afectar.
¿Por qué importa si choca contra la Luna?
Es cierto, la Luna no es la Tierra y nadie vive al