El reciente anuncio del Gobierno sobre el fin de las retenciones cero para el trigo y la soja ha generado una gran preocupación entre los pequeños y medianos productores. Esta decisión se produce a menos de un mes de las elecciones nacionales y en un contexto donde la oposición, representada por el espacio Provincias Unidas, está ganando terreno. A pesar de las críticas, el Gobierno sostiene que esta medida no afectará negativamente su imagen electoral.

Desde la Casa Rosada, se argumenta que la breve duración de la medida no debe ser vista como un retroceso. Funcionarios del Gobierno creen que la intención de beneficiar al sector agrícola será valorada, aunque reconocen que los grandes productores fueron los principales beneficiarios. La promesa de eliminar las retenciones de forma definitiva también fue reiterada, aunque se aclaró que esto no sucederá de inmediato.

El miércoles, ARCA anunció que se había alcanzado el cupo establecido en el decreto para las declaraciones juradas de ventas al exterior. Esta iniciativa, que buscaba aumentar las reservas del Banco Central, fue criticada por varios sectores, incluyendo a Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural. Pino expresó su sorpresa por la rapidez con la que se cubrió el cupo y cuestionó si los pequeños productores realmente pudieron aprovechar el beneficio. "Queremos ver si el productor realmente pudo aprovechar este beneficio. ¿Cómo puede ser que la exportación haya emitido en tan poco tiempo tantas declaraciones juradas para cubrir semejante cantidad de dinero?", dijo Pino.

El Gobierno, por su parte, defendió el proceso y aseguró que la comunicación se realizó de manera adecuada. "El problema es que los jugadores más grandes estaban mejor preparados. Pero eso no es nuestra responsabilidad", afirmaron. A pesar de las críticas, no hay indicios de un mea culpa por parte del oficialismo, que no espera que el descontento en el sector agropecuario impacte en los resultados electorales, incluso en provincias clave como Santa Fe y Córdoba, donde ya se anticipa una derrota.

En la Provincia de Buenos Aires, el Gobierno también confía en que la reaparición de las retenciones no afectará su desempeño electoral, a pesar de las dificultades que enfrentaron en las elecciones locales del 7 de septiembre. La situación en el campo sigue siendo tensa, y el futuro de las políticas agrícolas del Gobierno se mantiene en el centro del debate político.