Los seres humanos buscan vida en abundancia, posición entre la gente y provisión suficiente, pero no resulta extraño que se decepcionen al escudriñar las razones que trascienden en el ejercicio político, por lo que muchos terminan por ser ajenos a la participación democrática ante la desconfianza contra la clase dirigente que impera socialmente.
Para rasgar el paradigma que <<el miserable es el que vive largamente en el infortunio>>, no importa si es preciso afrontar el riesgo de la caída del honor a la vergüenza.
Cuando se habla de escalar en el poder, mantenerse o ascender es difícil, pero todavía más permanecer allí. Con mayor fundamento si se trata de la política como un ejercicio de pensamiento y ojalá manteniendo principios elementales.
Sin embargo, la aceptación indebida en quien