Después de un primer año extraordinario en Ducati, Marc Márquez está a las puertas de la gloria: el piloto español llega a Motegi, su antiguo hogar, con todo de cara para volver a proclamarse campeón del mundo, seis años después de su último título.
Una descomunal ventaja de 182 puntos sobre su hermano Álex, segundo clasificado del Mundial, es su gran aval para pensar que puede lograr su noveno 'anillo', el séptimo en MotoGP, en el Gran Premio de Japón de este fin de semana, donde aterriza con 11 victorias los domingos y 14 al sprint en 16 carreras.
Números que hablan de la superioridad con la que el piloto de Cervera se ha impuesto en el asfalto en lo que va de curso. De hecho, solo dejó de subirse al podio en Jerez y Las Américas, sumando dos segundas plazas y un tercer cajón a su dece