En la primera licitación de deuda del Tesoro tras el "efecto Bessent", el Gobierno logró un rollover del 130%, destacándose una alta demanda por cobertura cambiaria por parte del mercado. Así, logró el objetivo que se había trazado: absorber pesos para atenuar la presión cambiaria, tras la liquidación masiva de u$s 7000 millones de exportadores de granos, que culminará el próximo lunes.
La secretaría de Finanzas, comandada por Pablo Quirno, adjudicó $ 7,339 billones , tras recibir ofertas por $ 7,738 billones. Como vencían $ 5,6 billones, logró un financiamiento extra por $ 1,708 billones, que será depositado en la cuenta del Tesoro en el BCRA.
Esos pesos serán claves para que el Tesoro compre más dólares en bloque y aumente su poder de fuego en divisa extranjera.
En total, fueron $