El parque Magdalena , en pleno corazón del centro histórico de Huamanga, debería ser un espacio de encuentro, paseo y tradición. Sin embargo, en los últimos meses, este lugar se convirtió en un escenario de consumo de sustancias tóxicas como el terokal, expendio de alcohol y hasta de ofrecimiento de “sexo al paso”, lo que preocupa y afecta a los vecinos que conviven día a día con esta realidad.
Supervisarán obra del óvalo de la Magdalena tras casi dos meses de paralización
El problema, según los vecinos, se agravó con la masiva presencia de personas en estado de ebriedad y jóvenes que distribuyen volantes ofreciendo servicios sexuales, alterando el orden público y deteriorando la imagen de una de las plazas más emblemáticas de la ciudad de Ayacucho.
“Ya no se puede salir tranquila n