Las excavaciones arqueológicas en Roma y otras antiguas ciudades del Imperio han sacado a la luz detalles íntimos de la vida privada de los emperadores romanos que hasta hace poco eran desconocidos.
Más allá de los registros históricos y las leyendas, los hallazgos recientes muestran que la élite imperial disfrutaba de lujos, rituales y placeres que combinaban poder, erotismo y política.
Lujos que desafiaban la imaginación
Los emperadores romanos vivían rodeados de opulencia. Las excavaciones en villas y palacios han revelado habitaciones privadas decoradas con mosaicos eróticos, fuentes ornamentales y camas talladas en marfil.
Estos espacios estaban diseñados no solo para el descanso, sino para banquetes sensuales en los que la música, el vino y la compañía eran cuidadosamente selecci