En los últimos meses, en redes sociales y blogs de estilo de vida se ha popularizado la recomendación de combinar alcohol con cáscara de mandarina como alternativa natural para la limpieza del hogar o como aromatizante ambiental.
La idea parece sencilla: aprovechar los compuestos presentes en la cáscara de este cítrico y disolverlos en alcohol para dar lugar a una preparación de uso doméstico. Pero, ¿qué dice la evidencia científica y qué advierten los expertos?
De acuerdo con un estudio publicado en la revista AppliedChem, las cáscaras de mandarina contienen flavonoides, compuestos fenólicos y aceites esenciales como el limoneno, reconocidos por su actividad antioxidante y por tener cierta capacidad antimicrobiana en pruebas de laboratorio.
Estas sustancias pueden extraerse con facilid