Para el propietario del barco esta botadura trasciende no solo material, es el reflejo de la unión, la perseverancia y el compromiso. "No solo es un hito, expreso Jurado, sino un testimonio que los sueños cuando se trabajan con amor y esfuerzo se hacen realidad".
Daniel eligió el nombre de "Ciudad de Nijar" en homenaje a su padre Juan Jurado Redondo nacido en ese pequeño pueblo español de Almeria.
La celebración contó con un nutrido grupo de funcionarios provinciales y municipales, autoridades de Prefectura Naval Argentina, Banco del Chubut, colegas pescadores de Jurado y muchos amigos. La rotura de la botella de champagne fue realizada por la madrina de la embarcación, Marta Martínez, esposa del propietario.
De esta manera, el puerto de Rawson suma una nueva embarcación que viene a dar