El futbol en Ecuador atraviesa su momento más oscuro. Mientras la selección nacional celebra su clasificación al Mundial de 2026, el deporte local se ve golpeado por una escalada de violencia narco que ha dejado tres futbolistas asesinados en menos de un mes , en medio de denuncias de amaños de partidos, apuestas ilegales y amenazas de muerte.
La reciente ola de homicidios revela cómo las estructuras del crimen organizado han penetrado las canchas del país, utilizando el futbol como un vehículo para el lavado de dinero y la manipulación de resultados , una práctica cada vez más documentada por organismos internacionales.
El martes pasado, Jonathan González , volante del club 22 de Julio de la Segunda Categoría ecuatoriana fue asesinado en su casa del puerto de Esmeraldas, una de la