¿Sentís que tu celular está cada vez más lento? Las aplicaciones tardan en abrir, la pantalla se traba y todo parece funcionar a media máquina. No te preocupes: no siempre es culpa de la edad del dispositivo. Muchas veces, con un par de ajustes podés devolverle la agilidad y evitar el gasto de cambiarlo.
Uno de los secretos mejor guardados para acelerar cualquier celular es desactivar las animaciones y efectos visuales. Estos detalles, que parecen inofensivos, consumen recursos de la memoria y el procesador, sobre todo en equipos que ya tienen unos años encima.
Para hacerlo, tenés que entrar en Ajustes, buscar el apartado de Opciones de desarrollador y ahí modificar las escalas de animación de ventana, transición y duración de animador. Poné todas en “Animación desactivada”. Así, el telé