El piloto neerlandés Max Verstappen volvió a sorprender al mundo del automovilismo al imponerse en su debut en la categoría GT3, ganando nada menos que en el mítico Nürburgring, durante la prueba 4h Barbarossapreis. Todo esto mientras continúa en plena lucha por el título de la Fórmula 1, donde sigue siendo el gran protagonista de la temporada.
En compañía de su compañero Chris Lulham, Verstappen completó una actuación impecable en el circuito conocido como el Infierno Verde. Conducía un Ferrari 296 GT3 del equipo Emil Frey Racing y, pese a la dificultad de la pista y la fuerte competencia de Aston Martin y Audi, demostró una vez más su capacidad para adaptarse a cualquier disciplina del automovilismo.
La clasificación previa no fue sencilla. La lluvia complicó los tiempos y relegó a Ver