Según recoge El Caso , entraba en el gimnasio con una bolsa y se dejaba grabar por las cámaras de seguridad saliendo con dos o tres. Este error de principiante ha hecho caer a una ladrona quien, según todos los indicios, había vaciado hasta catorce taquillas en un mes. Los robos afectaron a usuarios de un gimnasio del distrito de Sant Martí de Barcelona y procuraron a la delincuente un botín de más de 5.300 euros entre ropa, dinero en efectivo y aparatos electrónicos.
Las sucesivas quejas de varios usuarios que alertaban de que les faltaban cosas de las taquillas, después de que alguien las hubiera forzado, pusieron en alerta a los trabajadores de las instalaciones. Fijándose en cómo una mujer en concreto salía más cargada de lo que había entrado levantó toda