"Nunca he tenido a alguien señalando con el dedo" , confesó Terry Francona, el manager que regresó de un año sabático para escribir un nuevo capítulo en la historia de la franquicia. Sus palabras, pronunciadas horas antes del partido definitivo, resonaron como un mantra para un equipo que supo mantenerse unido cuando todo parecía perdido.
Los números no mienten:
83-79: récord idéntico al de los Mets, pero con ventaja en el desempate (4-2 en enfrentamientos directos).
1-5: el pobre desempeño contra los Dodgers , su próximo rival en la serie de comodines.
322.6 millones: el presupuesto humillante de los Mets, el más alto de las mayores, que se quedaron fuera.
La ironía fue cruel para Nueva York. Aunque llegaron a ostentar la mejor marca de las Grandes Ligas (45-24) en junio, su colap