Incorporar frutos secos en la alimentación diaria se convirtió en uno de los hábitos más comunes de las personas que quieren cuidar su salud. Pero claro, surge la pregunta del millón: ¿cuánto es demasiado?
La buena noticia es que los expertos ya tienen el número preciso. La mayoría de las entidades, como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Fundación Española del Corazón, coinciden en un parámetro muy fácil de recordar para el adulto sano promedio: la ración diaria ideal oscila entre 20 y 30 gramos. ¿Y eso cómo se traduce en la vida real? Fácil: es lo que entra en un puñado, ni más ni menos.
Esta referencia se ajusta ligeramente según el tipo de fruto seco que elijas. Si hablamos de los más chiquitos, como las almendras o avellanas, la dosis segura es de aproximadamente 8 a 10