Cómo se preparan los demás países para estar listos en un futuro próximo.
Según informes de inteligencia y expertos occidentales, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, está acumulando recursos para un potencial enfrentamiento directo con la OTAN.
Esta estrategia combina reclutamiento acelerado, un auge en la industria armamentística y una guerra híbrida que socava la cohesión aliada desde dentro.
Según el Institute for the Study of War (ISW) y fuentes internas rusas, entre enero y el 15 de septiembre se firmaron aproximadamente 292.000 contratos con el Ministerio de Defensa, a un ritmo de unos 7.900 por semana.
Desde julio, parte de este personal estaría integrándose en una “reserva estratégica”, posible gracias a una caída temporal de las bajas rusas en verano.
Ataque ruso en Kiev: