Cuando la paciencia se agota, llegan los plazos. La alcaldesa de Valdivia, Carla Amtmann, puso sobre la mesa un ultimátum claro: la empresa a cargo del mall chino en construcción ilegal tiene solo 10 días hábiles para desarmar lo edificado en pleno centro de la ciudad.

No es la primera advertencia. El proyecto levantado en avenida Ramón Picarte ya había recibido dos rechazos de permisos y una tercera solicitud con observaciones sin resolver. Aun así, las faenas siguieron, desobedeciendo las órdenes municipales.

La autoridad fue tajante. El rol del municipio es velar que la normativa se cumpla, bajo el alero de la Ley General de Urbanismo y Construcciones, afirmó Amtmann al anunciar la resolución de demolición, tras el desacato de la empresa a las paralizaciones. “Se ha emitido

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