El ha aceptado indemnizar con 160.000 euros a los padres de una bebé recién nacida que perdió la vida en el Hospital de Tomelloso (Ciudad Real) tras una atención sanitaria considerada "deficiente".
Los hechos ocurrieron en noviembre de 2013 , cuando la madre, con un embarazo a término de 42 semanas y sin complicaciones previas, acudió a urgencias por una rotura prematura de membranas. A pesar de detectarse líquido meconial anómalo -una señal clara de posible sufrimiento fetal-, no se realizó una monitorización continua ni se actuó con la diligencia que la situación requería.
Según denuncia la Asociación , pasaron más de cinco horas hasta que se aplicó un control adecuado.
Cuando se decidió intervenir con una cesárea urgente, ya era tarde. La niña nació en mal estado, con signo