La madrugada del domingo, la tranquilidad de la apacible ciudad de Paita, en Piura, se rompió con un crimen que ha dejado huella en toda la comunidad. Kristell Morales Yenque , una joven madre de tres niños y con un embarazo de 14 semanas, murió luego de ser atacada salvajemente. Los médicos del Hospital Nuestra Señora de las Mercedes no pudieron salvarla: los golpes le causaron una hemorragia interna que acabó con su vida.
La tragedia estremece aún más porque la víctima ya había denunciado episodios de violencia anteriores. Familiares señalaron que el principal sospechoso, su pareja sentimental y padre de dos de sus hijos, Wender Alzate Carrasco, ya había mostrado conductas agresivas contra ella.
El ciudadano venezolano fue detenido por la Policía Nacional y permanece en la comisa