La interpretación del acuerdo es una suerte de apoyo a la gestión presidencial, borrón y cuenta nueva, y eliminar los costos de control de veracidad de contenidos.
YouTube aceptó pagar 22 millones de dólares al presidente Donald Trump para poner fin a una demanda por la suspensión de su cuenta en esa plataforma de videos después del asalto al Capitolio de 2021. La empresa filial de Google es la última red social, después de Meta y X, en sellar un acuerdo judicial con el mandatario republicano.
Las principales plataformas sociales y webs de videos eliminaron las cuentas de Trump después de que sus seguidores atacaran la sede del poder Legislativo, por temor a que promoviera más violencia con afirmaciones falsas de que el demócrata Joe Biden había hecho fraude en las presidenciales de 20