CLEVELAND (AP) — El inicio de la postemporada de Gavin Williams con los Guardianes de Cleveland el año pasado salió mal. Su segunda aparición en los playoffs pudo haber sido más dolorosa.

Williams ponchó a ocho y dispersó cinco hits en más de seis entradas, pero acusó un par de carreras sucias que permitieron a los Tigres de Detroit superar 2-1 a Cleveland n el Juego 1 de su serie de comodines de la Liga Americana el martes.

Los errores cometidos por el jardinero derecho puertorriqueño Johnathan Rodríguez en la primera entrada y el primera base dominicano Jhonkensy Noel en la séptima marcaron la diferencia en el primer partido de la serie al mejor de tres en el Progressive Field.

"Así suelen salir las cosas en el juego a veces", dijo Williams, encogiendo los hombros frente a su casillero. “Realmente no puedo pensar en eso. Si hay un error, ¿a quién le importa?”.

Pero en este caso, sí importaron.

El derecho se convirtió en el primer pitcher en perder un juego de postemporada mientras trabajaba seis o más entradas sin permitir carreras merecidas desde que Stephen Strasburg, derecho de Washington, lo hizo en el Juego 1 de la serie divisional de la Liga Nacional de 2017 contra los Cachorros de Chicago.

Williams concedió apenas una base por bolas durante su salida de 88 lanzamientos, que fue mucho mejor que su única aparición anterior en los playoffs. Comenzó el Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana el año pasado contra los Yankees de Nueva York, permitiendo tres carreras antes de ser retirado después de dos entradas y un tercio sin decisión.

"Especialmente después de lo que hice el año pasado, que tengan fe en mí para salir hoy, me hace sentir bien", dijo Williams, quien tuvo un récord de 12-5 con una efectividad de 3.06 en la temporada regular para los campeones de la División Central.

Retiró a 11 de 12 bateadores durante un tramo dominante entre la tercera y la sexta entrada, solo para terminar como el derrotado debido a lo que ocurrió en la séptima.

Detroit se adelantó 2-1 cuando el toque de sacrificio con un out de Zach McKinstry ante el relevista Hunter Gaddis remolcó a Riley Greene, quien comenzó con un doble contra Williams y estaba en tercera debido al mal trabajo de pies de Noel un bateador después.

Wenceel Pérez bateó un rodado fuerte que rebotó en el guante de Noel y llegó al segunda base Brayan Rocchio. Lanzó a primera, donde Noel había regresado apresuradamente, pero no alcanzó la base con su pie derecho. Williams fue retirado tras el error.

"La jugada fue muy rápida y luego, cuando intenté pisar, estaba un poco más allá de la base", dijo Noel. “Mi mentalidad era intentar atrapar la pelota e intentar hacer una jugada en tercera".

El error de Rodríguez en la primera entrada fue tras un sencillo de Kerry Carpenter que Rodríguez dejó caer mientras intentaba recogerlo cerca de la pared, dándole a Carpenter una base extra. Spencer Torkelson siguió con un sencillo de dos outs antes de que Williams ponchara a Greene.

"Fue más bien un error mental", dijo Rodríguez. "Quería apresurarme, pero fue un error mental".

De manera algo adecuada, la última oportunidad de los Guardians para extender el juego también se deshizo por falta de ejecución. José Ramírez dio un sencillo dentro del cuadro contra el cerrador Will Vest al comenzar la novena entrada, y corrió a tercera cuando el campocorto Javier Báez lanzó descontrolado a primera.

Con 26.186 fanáticos —la multitud más pequeña en la historia de los playoffs del estadio— de pie, Vest ponchó a George Valera y personalmente sacó out a Ramírez tras el rodado de Kyle Manzardo al montículo. C.J. Kayfus bateó un elevado para el último out.

Ramírez se negó a hablar formalmente con la prensa, pero dijo que salió a correr con el contacto, lo cual el manager Stephen Vogt confirmó.

“Si esa bola va dos pies en cualquier dirección, él anota”, dijo Vogt. “Simplemente la bateó directo a Vest. Así que jugamos agresivos. Siempre lo hacemos. Corremos las bases de manera agresiva. No lo haría de otro forma”.

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