La más reciente, una agonizante caída 23-20 ante Seattle Seahawks , terminó con un gol de campo de 52 yardas cuando el reloj ya marcaba cero.

"Soy optimista. Sé lo que tenemos en el vestuario" , declaró Kyler Murray , el mariscal de campo que completó 27 de 41 pases para 200 yardas, dos touchdowns y dos intercepciones. Sus palabras contrastan con una ofensiva que solo despertó en el último cuarto, acumulando 14 puntos en menos de ocho minutos para empatar un partido que parecía perdido.

Detrás de esta montaña rusa hay cifras preocupantes:

253 yardas totales ofensivas, la mayoría en tiempo de desesperación.

Dos intercepciones costosas, incluida una por un balón soltado por Marvin Harrison Jr. , la cuarta selección global del draft.

Una línea defensiva que, pese a las capturas de

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