Hasta ahora, hablar de San Carlo s era hablar de viñedos, montañas y también de orégano . Pero desde este año, el departamento mendocino suma un título inesperado: el de primer orégano del planeta con sello de Identificación Geográfica (IG)
Esta certificación internacional garantiza que la calidad de la hierba aromática está vinculada directamente al territorio que la produce y a quienes la cultivan.
El logro no es menor. Representa la posibilidad de blindar la producción local frente a imitaciones y de sumar prestigio en mercados donde el sello de origen funciona como un pasaporte de confianza .
Dos años de trabajo compartido
El reconocimiento llegó tras un proceso que demandó más de dos años de evaluaciones, catas y pruebas en distintas fincas. Allí, los productores tuvieron