Contrario a los antecesores del gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, quienes llegaban a la mitad de su mandado y con ello iniciaba la pérdida de poder, ahora, con la llegada del nuevo Poder Judicial local, la Administración transformadora y humanista del doctor se robustece.
Con un irrestricto respaldo por parte de Palacio Nacional, al ser el consentido de la presidenta de México, CLAUDIA SHEINBAUM PARDO, con un Poder Legislativo en Tamaulipas de color guinda y tras cortar los cordones umbilicales con el pasado, en el flamante Poder Judicial, el Ejecutivo estatal está más fuerte que nunca al entrar en su segunda mitad de Gobierno.
“Haiga sido como haiga sido”, la voluntad popular de las urnas le da a este nuevo Poder Judicial la autoridad moral y la legitimidad democrática para operar, l