Los vecinos de la urbanización San José, en el distrito 26 de octubre, viven un año de frustración debido a la lenta ejecución de la obra de agua y alcantarillado, que apenas alcanza un 30% de avance. El proyecto, que inicialmente debía concluir en seis meses, se ha convertido en un motivo de malestar vecinal y pérdidas económicas para los comerciantes de la zona.
Lentitud de la obra afecta la vida diaria
El retraso de la obra ha generado problemas de tránsito, polvo y tierra en las calles, obligando a los residentes a tomar medidas para proteger su salud. La contaminación por restos de antiguas tuberías de desagüe ha provocado molestias respiratorias en algunos vecinos, quienes han tenido que usar mascarillas para reducir los efectos del polvo.
“El proyecto debía concluir en seis meses