Manny Machado , el dominicano que sabe brillar en octubre, volvió a ser el héroe con un batazo que dejó sin palabras a la afición de Chicago.
El partido comenzó con un guiño al pequeño juego: "En playoffs, los detalles marcan la diferencia" , comentaría después el manager de los Padres. Jackson Merrill cumplió al pie de la letra con un elevado de sacrificio en la primera entrada que puso en ventaja a los visitantes. Una jugada que parecía insignificante, pero que terminó siendo el preludio de lo que vendría.
Los lanzadores tomaron el control durante las primeras entradas. Dylan Cease mostró destellos de su mejor versión, pero fue el bullpen de San Diego el que robó cámaras. Mason Miller, lanzando fuego puro, y Robert Suarez formaron un muro impenetrable:
14 lanzamientos por encima