Eran 35 niñas y niños que, frente a 103 mil aficionados en el Estadio Azteca, interpretaron “La bandera llena de estrellas”, himno nacional de Estados Unidos. Fue el preludio del que sería el primer juego de temporada regular que la NFL celebraba fuera de ese país.
México fue elegido como sede. El 2 de octubre de 2005, se hizo historia en el Coloso de Santa Úrsula, cuando los Cardinals de Arizona y los 49ers de San Francisco se enfrentaron. Aquella noche, se dio el primer gran paso a la globalización de una Liga que hoy tiene partidos en Inglaterra, Alemania, Brasil, Irlanda y España.
La NFL hizo una pausa de más 10 años sin visitar México, para volver en 2017 y 2018. En 2019, las condiciones de la cancha del Azteca impidieron que se disputara el juego programado. La pandemia de Covid-19