Una peligrosa banda criminal simuló ser personal de seguridad para ingresar al banco. El plan organizado durante meses se desmanteló por un error mínimo que encendió las alarmas de las autoridades.
La noche del 1 de octubre quedará registrada como una de las más tensas en la historia de Santa Marta. Un grupo de siete delincuentes , con un largo historial criminal, intentó ejecutar un plan para robar la sede de la empresa de valores Brinks, ubicada en un local dentro del Banco de la República en la ciudad de Santa Marta.
Lo que parecía una escena sacada de una serie de Netflix, en realidad fue un intento de hurto que involucró meses de planeación, un vehículo modificado para simular ser de una empresa de transporte de valores y la movilización de una banda criminal proveniente de Carta