Lo que empezó como una misión humanitaria terminó convertido en un capítulo lleno de tensión e incertidumbre. La Flotilla Global Sumud, que salió desde Barcelona rumbo a Gaza con alimentos, medicinas y esperanza, fue interceptada en pleno mar por fuerzas israelíes y entre las personas que iban a bordo había al menos seis mexicanos, y desde entonces no se deja de hablar de qué pasó con ellos y en qué condiciones están.

La idea original de la flotilla era simple: llevar ayuda directa a la gente en Gaza, donde la crisis humanitaria es brutal. Pero lo que parecía un acto de solidaridad internacional se volvió una noticia que encendió alarmas en México, pues las personas que iban en el barco, quedaron en medio de un gran conflicto internacional.

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