Álex Márquez ni olvida ni perdona todo lo que sucedió en el año 2019 , cuando se acababa de proclamar campeón de Moto2. En ese momento, ya estaba preparado para dar el salto a MotoGP, y estuvo estudiando todas sus opciones, aunque la que más convincente le resultó fue la de aterrizar en el equipo satélite de Yamaha. Las conversaciones estaban muy avanzadas, y el acuerdo llegó a estar firmado, pero nunca acabó de concretarse.
Y el motivo que se esconde detrás de esto es el ‘veto’ que la marca de Iwata tenía a la familia Márquez , por todo lo sucedido con Valentino Rossi, quien en ese momento todavía estaba en la estructura, como piloto del equipo oficial. Lin Jarvis, el director general, se vio obligado a prohibir esta operación, y esto provocó que el hermano menor de Marc tuviera