**¡El Senado da un golpe al Gobierno! Ratifican leyes clave**
El Senado de la Nación ha rechazado los vetos del presidente Javier Milei a las leyes de financiamiento universitario y de emergencia pediátrica, conocida como Ley Garrahan. Esta decisión se traduce en un nuevo revés político para el oficialismo, que enfrenta su tercera derrota legislativa en menos de un mes. La votación, que se extendió por más de seis horas, evidenció el aislamiento del Gobierno en el Congreso.
La ley de emergencia pediátrica fue aprobada con 59 votos a favor, 7 en contra y 3 abstenciones. Por su parte, la ley de financiamiento universitario obtuvo 58 apoyos, 7 rechazos y 4 abstenciones. Ambas leyes requieren una mayoría especial de dos tercios, lo que significa que el Poder Ejecutivo ahora debe promulgar estas normas.
Durante el debate, los senadores de la oposición criticaron fuertemente la política económica del Gobierno. El radical Flavio Fama advirtió que "el plan es que no haya plan para la educación pública". Desde el peronismo, Daniel Bensusán calificó de "falso" el dilema del equilibrio fiscal, señalando que se recortaron fondos educativos mientras se aumentaba el presupuesto para inteligencia.
La ley de financiamiento universitario incluye una actualización automática por inflación de los gastos de funcionamiento, un aumento salarial inicial del 40,8% y paritarias trimestrales. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el impacto fiscal de esta ley se estima en un 0,23% del PBI para 2025. En cuanto a la norma de emergencia pediátrica, busca mejorar los salarios de médicos y enfermeros en el área infantil, eliminando impuestos sobre guardias y horas extras, y permitiendo compras directas de insumos básicos.
El resultado de la votación pone de manifiesto la debilidad del oficialismo en la Cámara alta. Sin aliados estables, Javier Milei enfrenta crecientes obstáculos para implementar su agenda legislativa. La oposición ha advertido que, si el Ejecutivo intenta dilatar la implementación de estas leyes, se tomarán medidas adicionales, incluyendo un proyecto para rechazar el decreto que dejó en suspenso la ley de discapacidad.
La situación actual refleja un clima de tensión en el Congreso, donde los senadores de la oposición han expresado su descontento con la falta de diálogo y respeto por las leyes aprobadas. La atención ahora se centra en cómo el Gobierno responderá a este nuevo desafío legislativo y si logrará encontrar los recursos necesarios para cumplir con las leyes ratificadas.