**Petro exige a EE.UU. no interferir en Colombia**
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha solicitado este viernes al Gobierno de Estados Unidos que se abstenga de intervenir en la política interna del país. Esta declaración se produce tras las críticas del representante estadounidense ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Mike Waltz, quien cuestionó la gestión del Gobierno colombiano en materia de seguridad y la implementación del Acuerdo de Paz.
Durante una sesión del Consejo de Seguridad, Waltz acusó a la administración de Petro de "socavar el progreso" hacia una paz duradera y calificó de "irresponsables" las políticas del Ejecutivo colombiano. En respuesta, Petro utilizó sus canales oficiales para afirmar que la política de paz de Colombia es una decisión soberana y no debe ser objeto de injerencia extranjera. "Le solicito respetuosamente al Gobierno de los EE.UU. no entrometerse en la política interna de Colombia", expresó el mandatario.
Petro subrayó que el Consejo de Seguridad no tiene autoridad sobre la política de paz del país, que es soberana. "El Consejo de Seguridad, por declaración unilateral del Estado de Colombia, tutela solo el proceso de paz con las FARC, que estamos cumpliendo", aclaró. Además, el presidente criticó la postura de EE.UU. en relación con el narcotráfico y la trata de personas, sugiriendo que las declaraciones recientes buscan presionar a Colombia debido a su posición sobre el conflicto en Gaza.
En su mensaje, Petro también se refirió a la ofensiva militar israelí en Gaza, calificándola de "genocidio" y afirmando que quienes lo cometen deben ser juzgados en instancias internacionales. "Lo que sucede en Gaza es un genocidio, y los que lo cometen deben ser juzgados como fueron juzgados los genocidas nazis en Núremberg", concluyó.
Esta no es la primera vez que Petro hace un llamado a EE.UU. para que respete la autonomía de Colombia. En julio, ya había solicitado que se mantuvieran al margen de los asuntos internos del país tras críticas similares. La relación entre Colombia y EE.UU. ha experimentado tensiones desde el inicio del mandato de Petro, especialmente tras la revocación de su visa por parte del Departamento de Estado, en respuesta a sus declaraciones sobre el conflicto en Gaza y su participación en una manifestación propalestina en Nueva York.