Bogotá.- En el Hospital Militar Central de Bogotá, una unidad inusual patrulla los pasillos con una misión única en su tipo: levantar el ánimo de los soldados heridos en combate.
Kratos, Rafa y Lupa conforman la llamada “fuerza peluda”, un grupo de perros de apoyo emocional que visitan a los militares que se recuperan tras resultar heridos en enfrentamientos con los grupos armados ilegales de Colombia.
Uno a uno, los tres perros entran en la habitación del Sargento Segundo Jeisson Sánchez Duque, quien recibió un disparo durante un combate en el noroeste de Antioquia. Kratos, el perro de mayor edad, lo saludó con la pata tras recibir golosinas. Luego, Lupa se acomodó en el suelo y Sánchez la cepilló mientras permanecía sentado debido a su lesión de espalda.
“Es algo diferente… te olvidas