La Armada ha decidido dar un paso más en su camino hacia la transformación digital. Después de casi dos décadas trabajando en modernizar su funcionamiento, ahora pone el foco en el Arsenal de Cartagena.
El objetivo es sencillo: hacer que los procesos de trabajo sean más rápidos, más ordenados y más eficientes. Para ello, la Armada contratará un servicio especializado que se encargará de estudiar cómo funciona el arsenal hoy y de proponer mejoras.
No se trata solo de usar ordenadores o software nuevo. El plan busca cambiar la manera en que se trabaja. Se quieren automatizar tareas repetitivas, optimizar recursos y aprovechar al máximo la tecnología. La idea es que los arsenales, que son clave en el mantenimiento y apoyo de los buques, puedan responder mejor a las necesidades de la flota.