Por Carlos Rossi
El primer bolígrafo de la historia fue patentado en Estados Unidos en 1888 por el inventor estadounidense John J. Loud, pero no llegó a comercializarse y su patente caducó. Durante las décadas de 1910 y 1920 se registraron y fabricaron bolígrafos en Europa, pero la producción masiva no arrancó hasta 1935, cuando comenzaron a venderse en ese mismo continente por primera vez.
Tiempo después, molestos por los trastornos que les ocasionaban sus plumas fuente cuando estas se les atascaban en medio de un escrito, el húngaro Ladislao Biro y su hermano George, quien era químico, lograron una tinta que era muy útil para la escritura a mano, pero que tenía el inconveniente de que no podía utilizarse con la pluma, pues se trababa al escribir.
Ladislao ideó cómo resolver este últim