La historia del burro se remonta miles de años atrás, mucho antes de que el caballo se convirtiera en sinónimo de poder y prestigio. Estos animales, que hoy nos parecen sencillos compañeros de campo de una realidad cada vez más lejana, jugaron un papel fundamental en el comercio, la agricultura y hasta en los conflictos bélicos de la antigüedad. Desde sus primeros pasos domesticados hasta su presencia en programas de burroterapia actuales, son un testimonio de la relación milenaria entre los humanos y los équidos.

Un compañero ancestral

“Los burros fueron domesticados hace 7.000 años, aproximadamente. Los expertos no se ponen de acuerdo en si esta se produjo en el altiplano etíope o en el norte de Kenya, y poco se sabe de las culturas que vivían en estas regiones por aquella época”, expl

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