Viajar bajo tierra no solo significa desplazarse de un punto a otro. En varias ciudades del mundo, las estaciones de metro se han transformado en verdaderos íconos culturales y arquitectónicos que reflejan la identidad de cada lugar.
Desde diseños inspirados en la historia nacional hasta propuestas futuristas con arte contemporáneo, estos espacios buscan sorprender y ofrecer mucho más que un simple trayecto diario.
Palacios subterráneos y experiencias inmersivas
En Rusia, particularmente en Moscú y San Petersburgo, las estaciones fueron concebidas como “palacios para el pueblo”.
Mármol, murales y lámparas de araña acompañan los andenes, transmitiendo orgullo histórico y una atmósfera monumental.
Nápoles también se ha ganado un lugar destacado en el mapa del diseño arquitectónico con l