El delineado perfecto no es sólo una cuestión de moda, es el gesto beauty que transforma cualquier maquillaje. Una línea bien marcada puede agrandar visualmente los ojos, darle más definición a la mirada y sumar un toque de sofisticación al instante.

Sin embargo, muchas veces el problema no está en el pulso, sino en lograr que el trazo se mantenga intacto y no se corra a las pocas horas. Para un delineado perfecto , hay un truco que se volvió tendencia en redes y que vale la pena incorporar.

La clave del delineado perfecto está en maquillar desde adentro, sellar bien los pigmentos y evitar que el producto migre hacia la zona de las ojeras. Un perfilado limpio resalta la frescura del rostro y marca la diferencia entre un maquillaje improvisado y un estilismo pulido.

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