
Diversos estudios han demostrado que el home office es el modelo que permite a los trabajadores tener un mejor equilibrio entre la vida personal y laboral. No obstante, aún muchas empresas prefieren que sus equipos acudan a las oficinas y los han llamado de vuelta ( a veces no de la mejor manera ). Otros jefes, en cambio, han optado por una alternativa: el esquema híbrido.
Sin embargo, pese a que este modelo puede parecer el más adecuado para mantener conformes tanto a empleadores como a empleados, un estudio publicado recientemente en Nature reveló que, en términos de innovación, el trabajo híbrido es la peor de las alternativas. En concreto, determinó que, en este esquema, un trabajador tardaría alrededor de 12 años en generar una idea nueva .
El experimento fue realizado por investigadores de las universidades de Essex y Chicago , y contó con la participación de " profesionales de tecnología altamente capacitados " que trabajaban en una empresa tecnológica de India llamada HCL Technologies . De acuerdo con el estudio, prácticamente todos los participantes contaban con títulos universitarios o estudios avanzados en el campo de la ingeniería.
Como parte del estudio, los profesionales tuvieron que realizar " importantes tareas cognitivas, así como de colaboración ". En sus observaciones, los investigadores señalaron que, a pesar de que la innovación no era una parte fundamental de su trabajo, la empresa pagaba incentivos monetarios por fomentarla.
Durante los periodos de trabajo presencial y remoto, los empleados sugirieron ideas a un ritmo similar (según las conclusiones, a un trabajador promedio le toma cerca de 111 meses generar una idea). En contraste, durante el periodo híbrido, la tasa de generación de ideas disminuyó a una media de 0.0007 ideas al mes (es decir, que una nueva idea les tomaría alrededor de 143 meses).
La importancia de estar en el mismo espacio
Los investigadores afirman que la disminución en la innovación en el trabajo híbrido se debe a que este modelo aumenta el costo de la colaboración. Y es que es a través de interacciones aleatorias y espontáneas como surgen las nuevas ideas . Por tanto, cuando los empleados trabajan desde casa, es menos probable que ocurran estos " accidentes productivos ". Esto ha llevado a las empresas a buscar canales sustitutos como las llamadas " cafeterías virtuales ".
Estos espacios virtuales son un buen reemplazo de los espacios reales cuando se trata de modelos 100% remotos. Sin embargo, en el esquema híbrido surge un problema de coordinación porque, ¿cómo hacer coincidir a todos los miembros de un equipo cuando unos están en espacios virtuales mientras que otros conviven de manera presencial?
Los investigadores concluyen que " la innovación cae bruscamente en equipos que varían mucho entre estar en la casa y en la oficina ", pues mientras los trabajadores de oficina pueden hablar entre ellos en persona y los trabajadores remotos cuentan con herramientas para generar conversaciones en línea, los empleados en esquema híbrido tienen mayores retos a la hora de coordinar reuniones o coincidir en espacios, lo que se traduce en una menor generación de ideas.