Robert Lewandowski ha condenado al Barcelona con un fallo desde el punto de penalti que pudo empatar el choque contra el Sevilla y permitir a los culés darle la vuelta al partido. El polaco fue el encargado de lanzar una pena máxima, después de que Adnan Januzaj agarrase y derribase a Alejandro Balde en la zona de castigo, pero no acertó. El delantero del conjunto azulgrana la mandó fuera, cuando tenía la oportunidad de devolver las tablas en el marcador ante unos hispalenses que estaban siendo muy superiores.
Lewanodwski tomó carrerilla, inició su camino hacia el balón con su habitual paradinha incluida, pero en esta ocasión no consiguió acertar. Odisseas Vlachodimos acertó el lado al que el ariete lanzó, aunque no le hizo falta intervenir, puesto que el balón se fue directamen