La negociación sobre el aumento del salario mínimo de 2026 en Colombia se perfila como uno de los temas centrales en la agenda económica y social del país en lo que resta de 2025. Con millones de trabajadores atentos a la decisión que tomarán en conjunto con el Gobierno Petro y los gremios, la expectativa gira en torno a si el incremento superará la inflación, un criterio que siempre determinó en gran parte el ajuste y que, según expertos, difícilmente será ignorado para la mesa de concertación. La discusión cobra mucha más relevancia en un año preelectoral, donde las presiones políticas y sociales suelen influir en la determinación del nuevo monto.
El marco legal colombiano establece parámetros claros para la fijación del salario mínimo. La Corte Constitucional sostiene que el ajuste anu