El Real Valladolid logró arañar un punto gracias al arreón final, que derivó en el gol de tacón de Ponceau, con el que empató ante un Mirandés que, con escasa posesión del esférico, se había mostrado más efectivo de cara a la portería.

Los vallisoletanos llegaban a este nuevo derbi autonómico tras dos derrotas que habían empezado a disparar las alarmas, por lo que dejaron claro, desde el inicio, que pensaban recuperar la senda de la victoria y despejar dudas.

El debe de los blanquivioletas seguía estando en la creación y, si bien dominaba el juego, lo cierto es que no provocaba ocasiones de peligro, salvo un gran centro de Garriel al que Peter no llegó a rematar, por muy poco.

Mientras, el conjunto burgalés trataba de aprovechar los momentos en los que manejaba la pelota, pero se topó c

See Full Page